China Episodio 1

Aterrizamos en Beijing hacia las 8 de la mañana, pasar por aduanas, recoger las maletas, un taxi y al hotel. Hotel de superlujo, con una habitación que rondaría los 50 m, cama de matrimonio, una ducha espectacular, sala, televisión, aparato para hacer té, cafetera, etc. La leche. Lo primero que hicimos fue pegarnos un opulento desayuno en el hotel. La primera vez en mi vida que desayuno arroz 3 delicias… aunque tb había desayuno continental. Después nos tiramos un rato a descansar en las habitaciones unas horas después fuimos a comer. Mi primer contacto con un restaurate chino, que por las fotos que vi en la pared había tenído como comensales a Cho Yun Fat y Ang Lee entre otros. El sitio espectacular, todo un patio interior cubierto, decorado en plan palacio chino y con jaulas y farolillos colgando de todos lados. Comimos un poco de todo, bambú, hierbas salvajes picantes, rana, y alguna otra guarrada. Muy bien el primer contacto.

Esa tarde nos dejaron a Jose y a mi que nos diéramos una vuelta por Pekin, así que visitamos la plaza Tiannmen. Allí nos encontramos con unos chonis muy majos que pidieron acompañarnos para practicar inglés. Dimos una vuelta por los alrededores de la plaza y luego entramos a la ciudad prohibida con la foto de Mao al frente. La ciudad prohibida es inmensa, llena de espacios diferentes, lagos (que al estar bajo cero estaban helados), y mucha arquituctura china tradicional. Bastante impresionante.

A la noche salimos a cenar a un restaurante chino-pakistaní. Olía a Kebab, y la comida picaba muchísimo, pero muy bueno. Nos fuimos pronto a la cama que al día siguiente teníamos que coger un vuelo.

Cuando llegamos al aeropuerto vimos que nuestro vuelo había sido cancelado porque había malas condiciones en el aeropuerto de Luoyang. Vuelta al hotel, a que nos devolvieran nuestras habitaciones. Fuimos a dar una vuelta al mercado de la electrónica que es una puta locura. Miles de chinos gritándote al oido la marca del portatil que intentaban venderte TOSHIBA!!!! SONY!!! Ya fuera vimos un par de edificios gigantescos dedicados solamente a karaoke. Más tarde fuimos a tomar unas cervezas al beijing de los guiris a un par de sitios muy cool. Esa noche salimos a cenar con un montón de españoles que están en Pekin por trabajo, unos 10 o así. Luego salimos a tomar algo y cuando todo el mundo estaba de retirada, los dos que quedamos fuimos a una discoteca llamada Alfa, llena de extranjeros y música de los 80 a todo trapo. Al final me quedé yo solo pero me hice unos colegas multinacionales, españa, nueva zelanda, australia, finlandia… Acabé con un tortazo bastante importante, por supuesto me quedé hasta que cerraron. A la salida me las tuve que desear para explicarle al taxista chino donde estaba mi hotel. Sobrio no lo hubiera podido conseguir!

Al día siguiente, resacón y al aeropuerto. Sorpresa, vuelo cancelado! Genial. La solución fue coger un vuelo a una ciudad cercana, ZhenChou y dos horas de taxi hasta Luoyang.